Si tu hijo, tu misma, o ambos, tenéis epilepsia y quieres saber cuáles son las causas de la epilepsia, te merece la pena dedicar unos minutos a tener claros los principales motivos que llevan a una persona a ser epiléptica.
En este artículo de la serie dedicada a la epilepsia, te voy a explicar cuáles son las causas más frecuentes e importantes de epilepsia en niños y adultos, para que no te quedes con ninguna duda y puedas diferenciar bien cada situación.
Listado de Contenidos
Tipos de epilepsia según las causas
Hoy en día, las epilepsias se clasifican en dos grandes grupos:
- El primero de ellos es el de las epilepsias genéticas
- El segundo de ellos es el de las epilepsias sintomáticas
Las epilepsias genéticas
Las epilepsias genéticas son las más frecuentes en la edad pediátrica, por debajo de los 18 años. En general, se trata de epilepsias de tipo benigno asociadas a una predisposición que genera dificultades a nuestros sistema nervioso para controlar los flujos eléctricos cerebrales.
El tipo de epilepsias genéticas benignas de la infancia presentan una serie de características comunes importantes que podemos resumir en 5 puntos:
- No suelen aparecer antes del año de vida
- Segundo: Aparecen en niños con un desarrollo madurativo normal
- Las crisis no suelen ser frecuentes, intensas ni prolongadas
- No requieren tratamiento farmacológico o responden bien a ellos
- Las crisis desaparecen a lo largo del desarrollo sin provocar ninguna secuela
Las epilepsias sintómaticas
Las epilepsias sintomáticas son las más frecuentes en el adulto pero también pueden aparecer en la infancia. Son aquellas que están provocadas por algún tipo de lesión o daño neurológico o alteración metabólica. En los niños, las causas más frecuentes se asocian a tumores cerebrales y en los adultos a ictus.
A diferencia de las anteriores, las características de estas pueden ser mucho más importantes. Repasamos los cinco puntos anteriores:
- Pueden aparecer en cualquier momento de la vida porque se asocian a un problema concreto
- Aunque pueden aparecen en niños con un desarrollo madurativo normal, es importante valorar su relación con anomalías del desarrollo
- La frecuencia, intensidad y duración de las crisis se asocia al origen de las mismas
- Las crisis pueden ser resistentes al tratamiento farmacológico
- Las crisis no desaparecen espontáneamente y si su frecuencia, intensidad y/o duración son altas, pueden provocar secuelas o alteraciones en el proceso de desarrollo
¿Te gustaría averiguar por qué tu hijo tiene problemas?
Descubre ahora mis guías gratuitas para despejar tus dudas
