Normalmente, cuando hablamos de TDAH, solemos centrarnos en los puntos y aspectos en los que necesitamos trabajar para mejorar. Nos centramos en hablar de mejorar los síntomas nucleares y las dificultades que surgen en la vida diaria con el trastorno y nos olvidamos de algo tan importante como El autoconcepto y las fortalezas en el TDAH.
Evidentemente, tratar estos temas es necesario, pero también es vital hablar de las fortalezas individuales y de cómo trabajar en reconocerlas. Es importante porque, cada persona con TDAH es diferente y, si bien tenemos unos síntomas nucleares que pueden definir nuestras conductas, es importante trabajar en nuestro autoconcepto y autoestima de forma más individualizada.
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La autoestima, el autoconcepto y las fortalezas en el TDAH
Cuando hablamos de autoconcepto nos referimos a la imagen que tenemos de nosotros mismos. Se trata del conjunto de ideas que tenemos sobre nosotros: nuestra imagen, conducta, comportamiento, relaciones… Nuestro autoconcepto suele ser algo estable: la imagen que tenemos de nosotros mismos es constante. Aunque es cierto que con el tiempo puede cambiar o mejorar si trabajamos en ello. Se trata de una definición que tenemos de nosotros mismos:
“Creo que soy una persona inteligente, aunque algo tozuda. Siempre suelo estar nerviosa y llego tarde a los sitios. Soy bajita y tengo los pies grandes”
La autoestima, sin embargo, tiene que ver más con las emociones. Con cómo nos sentimos con nuestro autoconcepto. Con cómo nos valoramos en función de nuestro autoconcepto. No podemos expresarla con palabras, aunque sí podemos inferir cómo se valora una persona a través de sus autodescripciones y sus actitudes. La autoestima es la respuesta a la pregunta:
«¿Cómo te sientes contigo mismo?»
Nuestra autoimagen, por tanto, es la mezcla de nuestro autoconcepto y autoestima, que construimos a través de nuestras experiencias, nuestras relaciones con los demás, lo que escuchamos sobre nosotros… todo nuestro contexto y nuestras propias creencias del “yo ideal” va a terminar formando nuestro autoconcepto, nuestra autovaloración (autoestima) y, en definitiva, la imagen que tenemos de nosotros mismos.
Por qué trabajarla en TDAH
Al comienzo del post comentaba la importancia de no hablar únicamente de dificultades y déficits. Y he hecho algo de trampa, porque es cierto que, cuando hablamos de niños y niñas con TDAH, la autoestima suele estar bastante tocada. Solemos hablar poco de fortalezas. Y es importante conocerlas, valorarlas y hacer que formen parte de su día a día. Sus fortalezas van a ser su ancla en un mar lleno de tormentas.
Es importante, por tanto, recoger información sobre aquello que se nos da bien. Aquellas actividades en las que solemos destacar o que suelen apasionarnos. Recoger los elogios que solemos recibir para trabajar en nuestra autoimagen, pero también comprender qué es aquello que se nos da bien y nos gusta. Para construir nuestra identidad también alrededor de nuestras fortalezas y no únicamente con nuestras dificultades. Porque ser conscientes de nosotros mismos es importante. Saber en qué hemos de trabajar más es vital para mejorar, pero también tener en cuenta aquello en lo que podemos anclarnos para volver a motivarnos y continuar creciendo como personas.
Tener un trastorno mental, y esto es algo de lo que personalmente puedo hablaros, supone rodearte continuamente de dificultades que sabes que has de trabajar. Pero la reflexión de nuestros puntos fuertes. De aquello positivo que nosotros (y los demás) deberíamos ver en nosotros mismos no llega de manera tan fácil cuando tu día a día está lleno de baches.
Desde la familia y los centros educativos hemos, por tanto, de trabajar también en que seamos conscientes de nuestras fortalezas. En conocernos a nosotros mismos desde otra mirada. Entender que hay que mejorar, pero que también tenemos luces entre nuestras sombras.
Fórmate con nosotros
Para trabajar en ello, os invito al próximo webinar que hemos organizado desde academia INANP. En el mismo, trabajaréis conmigo actividades y estrategias para trabajar en sus fortalezas. Para construir un entorno seguro y tener siempre en cuenta aquello que puede servirnos de impulso en nuestro día a día.
Al final del webinar:
- Podrás aplicar técnicas y estrategias para reconocer sus puntos fuertes.
- Tendrás identificadas tus fortalezas y las de tus hijos.
- Comprenderás cómo usar las fortalezas como mecanismos para mejorar nuestro día a día.
La sesión será completamente online e incluye material complementario para que sigas trabajando en casa. Además, podrás volver a acceder al contenido cuando quieras.
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