Si eres un adulto con TDAH, o lo sospechas, y estás pasando por la crítica fase de entender y aceptar lo que supone todo esto en tu vida, no te puedes perder este artículo.
Conozco muchos casos, tanto por mi experiencia profesional como personal, en los que la aceptación del TDAH ha supuesto un importante problema para la persona y para su entorno.
La cuestión es mucho más importante de lo que parece, porque este es el primer paso para empezar a recuperar lo que de verdad necesitas en tu vida. Sí, el control.
En este artículo te voy a contar cómo gestionar esta complicada situación. Ahora mismo, te voy a desvelar las 6 claves que necesitas tener apuntadas en la portada de tu cuaderno de notas para saber cómo afrontar la percepción de los síntomas del TDAH en los adultos, la sospecha, y por fin, el diagnóstico, o lo que es lo mismo las 6 claves para aceptarlo y gestionarlo de una forma 100% constructiva y productiva.
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Clave nº1: No, no es mala suerte, es lo que te ha tocado
Lo primero que necesitas, es ser consciente de la realidad. El TDAH es un trastorno multifactorial, pero fundamentalmente genético y hereditario.
En el 50% de los casos, hay algún familiar de primer grado con el diagnóstico o con criterios suficientes para diagnosticarlo. En hasta un 70% de los casos te encuentras a algún familiar de 2º o 3º grado.
Por otro lado, ser prematuro, tener bajo peso al nacer, el consumo de tabaco, alcohol, u otras sustancias en el embarazo, entre otras, también pueden ser causas suficientes para desarrollar TDAH, o potenciar la predisposición genética.
Es lo que hay. A mi me tocó un nistagmo congénito. A ti te ha tocado un TDAH. Pues eso tenemos, y con eso nos tenemos que apañar. Y por mucho que quieras, no hay más
Clave nº2 : No, todo el mundo no está equivocado
Esto es algo que veo mucho en los adultos con TDAH. Es mucho más frecuente de lo que me gustaría encontrarme, casos en los que la persona con TDAH no tiene la más mínima conciencia de padecerlo.
Aunque tenga su vida manga por hombro, y todo el que le rodea sea perfectamente consciente de sus dificultades y de lo que le pasa, pero uno lo niega a toda costa.
Siempre digo que se convierten en políticos. Son capaces de negar la realidad, aunque la tengan delante de sus narices.
Clave nº3: No, esto no es tu forma de ser
Esto es algo que también veo mucho, cuando uno quiere buscar justificación para su situación. Cuando les has demostrado, delante de sus narices y sin lugar a dudas que tiene un problema, siempre está el comodín del público. Llega, la famosa frase de…
«Pero hombre, cada uno es como es. Hay personas más despistadas que otras, más inteligentes que otras, es lo normal…».
Sí, vale, esto es cierto. Pero hoy en día estas cosas se pueden medir y ver si lo tuyo está de verdad dentro de lo normal, o se sale de la gráfica tres pisos. Aquí no estamos hablando de opiniones, hablamos de datos.
Clave nº4: Para, respira, reposa, para a entenderte a ti mismo, y al mundo a tu alrededor
Párate un momento. Realmente sabes lo que te pasa. Al menos, sabes que algo te pasa. Hay una frase que repito en la consulta con frecuencia, normalmente a los padres, pero también a adultos.
Puestos a tener algún problema de estas características infinitamente mejor el TDAH, que otra cosa.
Sí, puede sonar un poco…, pero es la realidad. El TDAH, se puede estudiar objetivamente para diagnosticarlo. Se puede tratar, y además hay variadas y muy eficaces opciones de tratamiento.
Hay casos que son completamente recuperables, y la mayoría de las personas con TDAH pueden hacer una vida perfectamente normal, con sus tratamientos y terapias.
Clave nº5: Cambia el chip, cambia el centro de tu foco, cambia tu (Escasez)
Aquí, hay un dato importante.
Hay estudios que muestran cómo las personas con TDAH tienen problemas para interpretar las expresiones emocionales de los demás.
Siempre amplio este dato diciendo que, por tanto, también es predecible que tengan problemas para expresar sus emociones, ya sea a través de los gestos o de las palabras. Algo muy típico de las personas con TDAH es que sean capaces de extraer la peor de las interpretaciones posibles de una frase que le puedas decir, pero sea incapaz de cuidar las formas con las que te habla, incluso en la misma frase que te está diciendo.
¿Qué quiero decir con esto? Pues que necesitas empezar a pensar de otra forma. Necesitas abrir la mente y empezar a plantearte que a lo mejor los demás no son tu enemigo. Qué puedes, hacer las cosas de otra forma, aunque ahora, mismo no sepas cómo.
Clave nº6: Aprende a sacar el máximo partido de tus virtudes y tus defectos (Abundancia)
¿Conoces las teorías de la mentalidad y de la abundancia? ¿No te suenan de nada?
Hay mucha historia detrás de ellas, pero en resumidas cuentas se trata de diferentes formas de ver la vida. Con la mentalidad de la escasez nos planteamos que las cosas son limitadas, y que por lo tanto, hay que repartirlas, por ejemplo, la riqueza.
En cambio, con la mentalidad de la abundancia nos planteamos que las cosas no son limitadas, y por lo tanto que podemos crear más en beneficio de todos.
¿Y para qué te cuento esto? Pues, porque necesitas, imperiosamente, incluir la mentalidad de la abundancia, en tu vida, y dejar, de ponerte límites.
Necesitas exprimir al máximo tus capacidades tus virtudes, tus puntos fuertes… y dejar de mirar, constantemente, hacia tus defectos sus dificultades o tus limitaciones.
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