Mi Camino Hasta Llegar Aquí
Mi Camino Hasta Llegar Aquí no ha sido nada fácil pero si muy gratificante. Si quieres conocerlo, prepárate un café y empieza a leer, así entenderás muchas cosas. Si quieres puedes echarle un ojo en Linkedin o en Doctoralia.
Los Primeros Pasos
Nací en San Fernando (Cádiz) en 1980 y cursé la Licenciatura de Medicina en la Universidad de Cádiz (1998-2004) y realicé la Especialidad de Pediatría en el Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla (2005-2009).
Durante ese periodo tuve la suerte de poder especializarme en Neurología Pediátrica en una de las mejores unidades del país y una de las pocas acreditadas oficialmente. Este fue uno de los pasos profesionales más importantes de movida para poner en marcha Mi Camino Hasta Llegar Aquí
El Mundo de la Neurología Pediátrica
Elegí quedarme con esta especialidad dentro de la Pediatría por las características de los pacientes y las familias con las que tuve la posibilidad de tratar en el hospital. Aun siendo solo un MIR en formación, lo que viví en ese mundo de la neurología me marcó algunas cosas a fuego en la mente que hoy aún no dejo de recordar.
Durante ese periodo de formación en Neurología Pediátrica me fui empapando de los conocimientos de los libros, los compañeros y de todo lo que me enseñaros los pacientes y sus familias. De ellos fue de los que más aprendí. Aprendí una virtud de la que estoy muy orgulloso, Aprendí a escuchar y creer en lo que dicen los padres y las madres. Una de las cosas que un Pediatra debe tener claro desde el primer día es que hay que creer a unos padres hasta que se demuestre lo contrario aunque las pruebas no den unos resultados claros.
Otro punto importante a tener en cuenta es que en Medicina debemos huir de la opinión y apoyarnos en los datos y la ciencia. Evidentemente, la Medicina tiene mucho de arte pero si no hiciese las cosas con estas premisas no habría sido capaz de seguir Mi Camino Hasta Llegar Aquí.
¿Por qué me centré en el TDAH y los Problemas de Conducta?
Pues la verdad es que debo reconocer que por diferentes motivos la vida me fue llevando por este camino. Uno de estos motivos fue mi insistencia en rechazar las injusticias. Las que sufren los demás pero también las que he sufrido yo.
Tras finalizar la especialización en Neurología Pediátrica apareció la posibilidad de solicitar un puesto de becario en un proyecto de investigación destinado al TDAH. Me pareció una oportunidad interesante debido a las escasas expectativas laborales que por aquella época ya se avecinaban, de modo que me plantee presentarme. Mi curriculum era ya bueno por aquel entonces y pensé que tendría muchas posibilidades de conseguirlo.
A pesar de algún intento de evitar mi candidatura (a esto me refería con la injusticia), no cejé en el empeño y finalmente conseguí participar en el proyecto sobre el TDAH. Este proyecto acabó siendo realmente un éxito y «de aquellas lluvias vienen estos lodos», es decir, de esa decisión mía derivan muchas de mis circunstancias actuales.
¿Cómo he llegado a la situación actual?
Desde entonces he recorrido un largo y apasionante camino dedicado a la Neurología Pediátrica y muy especialmente al TDAH, los TEA y los Trastornos de Conducta, Aprendizaje… No ha sido nada fácil por motivos muy variados pero me siento muy orgulloso de haber podido salir adelante en estas condiciones y gracias al apoyo y reconocimiento de mis pacientes y sus familias.
La evolución natural de las cosas me ha llevado a la situación actual. Desde el final de mi especialidad he estado trabajando tanto en la Sanidad Pública com en la Sanidad Privada. Cada una tiene sus puntos fuertes y sus puntos débiles pero ambas pueden ser complementarias y deben trabajar de la mano para ayudar a las familias que lo necesitan.
La importante demanda de Atención Sanitaria Especializada y Personalizada me llevó a poner en marcha mi Consulta Privada y a desarrollar programas específicos orientados a solucionar los problemas y cubrir las necesidades de las familias. Por eso he tenido la suerte de conseguir llevar todo este trabajo hacia delante. Hago algo que en teoría debemos hacer todos pero de una forma diferente. Soluciono problemas.
Suelo decirle a las familias que «Yo vivo de vender información y resultados«. Soy honesto con ellos, les cuento las cosas tal como son y les oriento en todo lo que necesitan. Además, me tienen a su disposición siempre para cualquier duda que ls pueda surgir. Todo esto las familias lo saben agradecer.
¿Es fácil compatibilizar Consulta Pública y Privada?
Puedo deciros que NO es fácil. Por mucho que uno tenga una determinada forma de trabajo al final tienes que adaptarte al entorno y al tipo de paciente.
La Sanidad Pública tiene una cosa característica, en general, tu te sientas en la consulta y los pacientes van llegando solos. Cuando inicias una consulta pública, los pacientes que llegan no te conocen de nada y asumen que eres un profesional razonablemente cualificado. Si haces bien tu trabajo, acabarás atrayendo un importante número de pacientes que quieren específicamente que seas tu el que lo vea, pero desde el primer día lo habitual es tener la consulta llena.
La Sanidad Privada es lo contrario en este aspecto. Cuando abres una Consulta Privada, no te sientas a esperar que vengan los pacientes. Puedes hacerlo pero estás abocado a un rotundo fracaso. Pasar de ir al médico a la situación de pagar para ir al médico es un gran paso. Que alguien esté dispuesto a pagarte por tu trabajo requiere un elevado nivel de confianza del paciente. Yo puedo estar contento sabiendo que el 75% de mis pacientes acuden por la recomendación de un paciente previo. El porcentaje restante me conoce en conferencias, en internet o en medio de comunicación…
Pienso que tengo mucho que aportar a mis pacientes y sus familias
Según puedo comprobar diariamente en mi consulta privada, es muy necesario aún avanzar en la comunicación a la sociedad sobre los problemas neurológicos infantiles. Uno de los importantes problemas es la gran variedad de trastornos, lo dificil de su detección y diagnóstico y el enorme desconocimiento de la inmensa mayoría de ellos.
- Un ejemplo claro lo tenemos con el TDAH. Hay mucha controversia inútil sobre cosas tan básicas como si existe o no. Cada vez que escucho algo así contesto que si alguien quiere saber si el TDAH existe, venga una tarde conmigo a pasar consulta y a escuchar a las familias que atiendo, los problemas que sufren y como mejora la situación cuando se detecta, se informa y se trata correctamente.
- Otro ejemplo está en las Migrañas en los niños. La mayoría de las personas no le da mucha importancia a los dolores de cabeza de los niños, pero pueden empezar desde pequeños y puede darle muchos problemas en su vida diaria (asistencia escolar, relaciones sociales, carácter, sueño…).
En resumidas cuentas, cuantos más pacientes veo en mi consulta, más claro tengo que aún hay mucho que hacer por la Neurología Pediátrica.
Los pacientes y sus familias. Por eso sigo trabajando con ilusión y ganas y colaborando en multitud de Sociedades Científicas y Grupos de Expertos en la materia.
Todos juntos podremos conseguir alcanzar nuestro lema «La Serenidad de Saber Que Todo Va Bien«.
Espero que os haya resultado entretenido y hayáis podido conocerme mejor.
¿Quieres que te ayude?
Y si quiere pedir una consulta conmigo puedes hacerlo de diferentes formas:
- De forma presencial: Virgen del Valle 2b. Sevilla
- Contactando por teléfono 682 651 047
- Correo electrónico: recepcionista@elneuropediatra.es
- Consultarme on line ahora mismo